Casi sin darme cuenta, como suele sucederme seguido con Marilyn, abrí una de sus fotos en el Photoshop y me puse a "jugar". Y como les pasaba a los fotógrafos que la retrataron tantas miles de veces, no es un trabajo ni algo complicado conseguir extraer de su rostro imágenes llenas de vida y de calor; de matices y tonalidades siempre cálidas e insinuantes.
Es ella quien lo consigue. Siempre. No importa lo que los fotógrafos hicieran en su momento. No interesa lo que yo manipule en la computadora... Es Marilyn quien sigue y seguirá expresando todo el encanto y la profundidad de su interioridad femenina...
Es ella quien lo consigue. Siempre. No importa lo que los fotógrafos hicieran en su momento. No interesa lo que yo manipule en la computadora... Es Marilyn quien sigue y seguirá expresando todo el encanto y la profundidad de su interioridad femenina...
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